Los familiares de los presos políticos mapuches en huelga de hambre anunciaron que no levantarán la protesta pese a que su estado de salud es crítico. Cumplieron 57 días sin ingerir alimentos sólidos.
En un comunicado, indicaron que los 34 ayunantes han perdido alrededor de 20 kilos y manifiestan un deterioro tanto físico como psicológico.
Asimismo, cuestionaron la falta de disposición del Gobierno "para establecer instancias de diálogo reales y claras" que puedan resolver el conflicto.
Dijeron que sólo se ha desarrollado una campaña mediática pero aún "no hay opciones concretas para conversar". Por lo cual evaluaron que existe "falta de voluntad política para salvar la vida de 34 personas que defienden el derecho a un juicio justo".
El eje del conflicto es la reivindicación de tierras por parte de los mapuches, quienes consideran que alrededor de 3 millones de hectáreas les pertenecen en el sur del país.
Los mapuches iniciaron la huelga el 12 de julio. Exigen el fin de la aplicación de la Ley Antiterrorista sancionada durante la dictadura de Pinochet y rechazan la propuesta de perfeccionarla emitida por el Gobierno.
Además, reclaman el fin del doble procesamiento, civil y militar, que se les aplica y la desmilitarización de su territorio.
Fuente: http://www.agenciapulsar.org
lunes, 6 de septiembre de 2010
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