Este miércoles se realizó en la capital de Colombia, Bogotá, una jornada contra los megaproyectos minero-energéticos. El objetivo fue sensibilizar sobre los efectos de estos proyectos en el territorio y en el medio ambiente.
La jornada de protesta inició el lunes 14 de marzo, al celebrarse el Día Internacional de Acción contra las Represas, por los Ríos, el Agua y la Vida.
Las primeras movilizaciones se realizaron en las regiones del país más afectadas por los megaproyectos y concluyeron el 16 de marzo en la ciudad de Bogotá.
Tuvieron como propósito hacer un llamado a la defensa de los territorios, al debate y a la construcción de una política que respete la soberanía alimentaria y energética
Asimismo, plantearon la necesidad de generar alternativas al modelo extractivo impuesto por las empresas de capital privado nacional y trasnacional. Señalaron que estas compañías desconocen las necesidades y reivindicaciones de los pueblos y vulneran los derechos de quienes habitan los territorios.
Participaron de las movilizaciones organizaciones como la Red Nacional de Pueblos Afectados y Amenazados por Represas y Trasvases, las Comunidades afectadas por la Mina la Colosa y el Movimiento Social por la Defensa del Río Sogamoso.
La red de afectados por represas sostuvo que los "grandes proyectos mineros e hidroeléctricos han significado la vulneración de los derechos, el despojo de tierras, la afectación de las maneras de sobrevivencia y una fuerte agresión a las culturas indígenas del país".
Asimismo, denunció que "los proyectos en curso desplazarán a más de 10 mil personas y afectarán las formas de vida de miles más".
Tatiana Rodríguez, Red de Acción contra la Gran Minería
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