"Pedimos que las autoridades chilenas políticas y judiciales tomen las medidas para poner término a la politica actual..."
"...Más concretamente, pedimos la libertad inmediata de los señores Llaitul, Llanquilef, Huenuche y Huillical, como fue el caso de los otros 13 co-acusados en el proceso de Cañete.
Frente al resultado del reciente proceso contra 17 miembros de comunidades mapuche de Chile, que se realizó en la ciudad de Cañete hasta el 22 de febrero de 2011, varias organizaciones y asociaciones de la sociedad civil de Ginebra, de Suiza y de Europa, quieren dar a conocer a las autoridades políticas y judiciales de Chile, por medio de un pronunciamiento donde expresan la inquietud frente a la manera en la que este proceso fue llevado, crítica de la actitud del Estado chileno hacia las reivindicaciones de los pueblos originarios que persiste en llevar una política agresiva y desconfiada hacia los pueblos originarios.
También se expresa en este pronunciamiento la solidaridad hacia los pueblos originarios de Chile.
La lucha de los pueblos originarios, particularmente del pueblo mapuche, no persigue un objetivo que se reduce al simple interés étnico o de la comunidad restringida. Al contrario, estas reivindicaciones se articulan en torno a tres ejes que conciernen al conjunto de la sociedad chilena, que son el desarrollo sustentable y justo, en el respeto de los criterios ecológicos, el respeto de las particularidades de las minorías en el seno de una sociedad multicultural y un sistema político y administrativo realmente descentralizado.
"...Más concretamente, pedimos la libertad inmediata de los señores Llaitul, Llanquilef, Huenuche y Huillical, como fue el caso de los otros 13 co-acusados en el proceso de Cañete.
Frente al resultado del reciente proceso contra 17 miembros de comunidades mapuche de Chile, que se realizó en la ciudad de Cañete hasta el 22 de febrero de 2011, varias organizaciones y asociaciones de la sociedad civil de Ginebra, de Suiza y de Europa, quieren dar a conocer a las autoridades políticas y judiciales de Chile, por medio de un pronunciamiento donde expresan la inquietud frente a la manera en la que este proceso fue llevado, crítica de la actitud del Estado chileno hacia las reivindicaciones de los pueblos originarios que persiste en llevar una política agresiva y desconfiada hacia los pueblos originarios.
También se expresa en este pronunciamiento la solidaridad hacia los pueblos originarios de Chile.
La lucha de los pueblos originarios, particularmente del pueblo mapuche, no persigue un objetivo que se reduce al simple interés étnico o de la comunidad restringida. Al contrario, estas reivindicaciones se articulan en torno a tres ejes que conciernen al conjunto de la sociedad chilena, que son el desarrollo sustentable y justo, en el respeto de los criterios ecológicos, el respeto de las particularidades de las minorías en el seno de una sociedad multicultural y un sistema político y administrativo realmente descentralizado.
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