El líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, cuestionó el discurso del presidente estadounidense Barack Obama, respecto al asesinato del líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden. Del mismo modo, condenó las acciones de cómo fue desaparecido el cuerpo del insurgente, pues considera que arrojarlo al mar “demuestra (el) temor e inseguridad” de Washington.
Fidel Castro realizó las declaraciones en sus más recientes Reflexiones: El asesinato de Osama Bin Laden, publicadas hoy.
El ex jefe de Estado cubano subrayó que “el discurso elaborado con esmero” por el mandatario norteamericano para anunciar la muerte de Bin Laden, “encierra una dramática verdad, pero no puede impedir que las personas honestas recuerden las guerras injustas desatadas por Estados Unidos en Iraq y Afganistán”.
Obama, el pasado domingo, señaló que “las peores imágenes son aquellas que fueron invisibles para el mundo. El asiento vacío en la mesa. Los niños que se vieron forzados a crecer sin su madre o su padre. Los padres que nunca volverán a sentir el abrazo de un hijo. Cerca de tres mil ciudadanos se marcharon lejos de nosotros, dejando un enorme agujero en nuestros corazones”.
El ex mandatario cubano, en ese sentido, reiteró que tampoco se olvidará “a los cientos de miles de niños que se vieron forzados a crecer sin su madre o su padre y a los padres que nunca volverían a sentir el abrazo de un hijo”, por las guerras auspiciadas por el Pentágono durante años.
Recordó que millones de ciudadanos tuvieron que marcharse lejos de sus pueblos “en Iraq, Afganistán, Vietnam, Laos, Cambodia, Cuba y otros muchos países del mundo”, donde Estados Unidos ha intentado sembrar el miedo.
Del mismo modo, sostuvo que de la mente de millones de personas “no se han borrado tampoco las horribles imágenes de seres humanos que en Guantánamo, territorio ocupado de Cuba, desfilan silenciosamente sometidos durante meses e incluso años a insufribles y enloquecedoras torturas; son personas secuestradas y transportadas a cárceles secretas con la complicidad hipócrita de sociedades supuestamente civilizadas”.
Fidel Castro afirmó que Obama no tiene manera de ocultar que Bin Laden fue ejecutado en presencia de sus familiares, en Pakistán, “un país musulmán de casi 200 millones de habitantes, cuyas leyes han sido violadas, su dignidad nacional ofendida, y sus tradiciones religiosas ultrajadas”.
“La propia opinión pública de Estados Unidos, después de la euforia inicial, terminará criticando los métodos que, lejos de proteger a los ciudadanos, terminan multiplicando los sentimientos de odio y venganza contra ellos”, señaló el ex mandatario cubano.
El ex jefe de Estado cubano subrayó que “el discurso elaborado con esmero” por el mandatario norteamericano para anunciar la muerte de Bin Laden, “encierra una dramática verdad, pero no puede impedir que las personas honestas recuerden las guerras injustas desatadas por Estados Unidos en Iraq y Afganistán”.
Obama, el pasado domingo, señaló que “las peores imágenes son aquellas que fueron invisibles para el mundo. El asiento vacío en la mesa. Los niños que se vieron forzados a crecer sin su madre o su padre. Los padres que nunca volverán a sentir el abrazo de un hijo. Cerca de tres mil ciudadanos se marcharon lejos de nosotros, dejando un enorme agujero en nuestros corazones”.
El ex mandatario cubano, en ese sentido, reiteró que tampoco se olvidará “a los cientos de miles de niños que se vieron forzados a crecer sin su madre o su padre y a los padres que nunca volverían a sentir el abrazo de un hijo”, por las guerras auspiciadas por el Pentágono durante años.
Recordó que millones de ciudadanos tuvieron que marcharse lejos de sus pueblos “en Iraq, Afganistán, Vietnam, Laos, Cambodia, Cuba y otros muchos países del mundo”, donde Estados Unidos ha intentado sembrar el miedo.
Del mismo modo, sostuvo que de la mente de millones de personas “no se han borrado tampoco las horribles imágenes de seres humanos que en Guantánamo, territorio ocupado de Cuba, desfilan silenciosamente sometidos durante meses e incluso años a insufribles y enloquecedoras torturas; son personas secuestradas y transportadas a cárceles secretas con la complicidad hipócrita de sociedades supuestamente civilizadas”.
Fidel Castro afirmó que Obama no tiene manera de ocultar que Bin Laden fue ejecutado en presencia de sus familiares, en Pakistán, “un país musulmán de casi 200 millones de habitantes, cuyas leyes han sido violadas, su dignidad nacional ofendida, y sus tradiciones religiosas ultrajadas”.
“La propia opinión pública de Estados Unidos, después de la euforia inicial, terminará criticando los métodos que, lejos de proteger a los ciudadanos, terminan multiplicando los sentimientos de odio y venganza contra ellos”, señaló el ex mandatario cubano.
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