El Gobierno de México confirmó la existencia de agentes de organismo antidrogas y de inteligencia estadounidenses en el país, aunque justificó la presencia de éstos a una supuesta cooperación y asesoría en labores de investigación que no violan las leyes de la nación latinoamericana.
El secretario de Gobernación (Interior) de México, Francisco Blake, se refirió el pasado martes en rueda de prensa a la permanencia en su país de efectivos de Administración Antidrogas Estadounidense, la Agencia Central de Inteligencia (DEA, CIA, por su sigla en inglés) y el Departamento de Estado de Estados Unidos.
“Las tareas de cooperación internacional en materia de seguridad se hacen conforme al marco constitucional y a los tratados internacionales debidamente suscritos por el Estado mexicano”, afirmó Blake.
El funcionario mexicano hizo esta declaración después de acudir, junto a la canciller Patricia Espinosa y el secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional, Alejandro Poiré, a una comparecencia privada ante la Comisión Bicameral de Seguridad del Congreso de México para aclarar el controvertido asunto.
La semana pasada, un diario estadounidense publicó que un total de 24 agentes de la CIA y de la DEA participan en México en labores de investigación y entrenamiento para combatir al narcotráfico y al crimen organizado.
Posteriormente portavoces del Departamento de Estado estadounidense aseguraron que su Gobierno había intensificado sus operaciones de apoyo a la lucha antidrogas en México con un mayor intercambio de información e inteligencia sobre las organizaciones criminales que actúan en México.
Ante las aclaraciones, sectores sociales entraron en disgusto, incluyendo la del poeta mexicano Javier Sicilia, uno de los activistas más dinámicos en los últimos meses, así como de algunos legisladores por considerar estos hechos como una violación a la soberanía nacional.
"La participación de funcionarios extranjeros en nuestro país no les autoriza el ejercicio de tareas reservadas al Gobierno mexicano, ni les faculta ejercer actos de autoridad en territorio mexicano", puntualizó Blake a los medios.
Blakle reconoció que su Gobierno necesita "contar con información adecuada para que el combate a la delincuencia organizada trasnacional" tenga un resultado "más eficaz".
Por ello, "hemos procurado una coordinación sistemática de información e inteligencia mediante la integración de datos e intercambio de información", dijo.
Entretanto, también en rueda de prensa, el presidente de la Comisión de Seguridad del Senado, Ricardo Arce, afirmó que los funcionarios mexicanos no precisaron la cifra de agentes de Estados Unidos que se encuentran en el país, pero dijeron que todos estos están "de manera eventual" y con "estatus e inmunidad diplomática" por acuerdos bilaterales.
"No actúan en funciones operativas sino en la investigación y la asesoría técnica, por lo que no violan las leyes del país", indicó el legislador.
La comparecencia de los responsables de la seguridad y diplomacia mexicana se realizo en el Senado mexicano a puerta cerrada por razones de seguridad.
Por otro lado, en Lechería estan amenazando con sacar a los migrantes de la casa para migrantes San Juan Diego.
Mediante un comunicado, la organización detalló que al menos 30 habitantes de la comunidad se congregaron al exterior del albergue para exigir su cierre.
Los inconformes amenazaron con quemar las instalaciones o con irrumpir y sacar a los migrantes. Los pobladores argumentaron que atrae problemas de narcotráfico a su barrio.
Durante ese tiempo, los migrantes permanecieron al interior del albergue mientras defensores negociaban con los habitantes.
Amnisitía Internacional recordó que el siete de agosto fue localizado junto a unas vías del tren, cercanas al refugio, el cadáver del migrante guatemalteco, Julio Fernando Cardona.
Según los migrantes, agentes de la policía municipal arrestaron a Cardona varias horas antes de que fuera hallado muerto.
Amnistía denuncio que hasta el momento no existe ningún detenido por este hecho y los responsables permanecen libres.
Testigos afirmaron que las lesiones que presentaba Julio Fernando sugerían que lo habían golpeado en la cabeza hasta matarlo.
Amnistía Internacional señaló que muchos migrantes son secuestrados por bandas criminales, en ocasiones con la complicidad de funcionarios locales.
Del mismo modo, advirtió que este sector social se encuentra en una situación extremadamente vulnerable a su paso por México debido a los abusos cometidos en su contra.
El secretario de Gobernación (Interior) de México, Francisco Blake, se refirió el pasado martes en rueda de prensa a la permanencia en su país de efectivos de Administración Antidrogas Estadounidense, la Agencia Central de Inteligencia (DEA, CIA, por su sigla en inglés) y el Departamento de Estado de Estados Unidos.
“Las tareas de cooperación internacional en materia de seguridad se hacen conforme al marco constitucional y a los tratados internacionales debidamente suscritos por el Estado mexicano”, afirmó Blake.
El funcionario mexicano hizo esta declaración después de acudir, junto a la canciller Patricia Espinosa y el secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional, Alejandro Poiré, a una comparecencia privada ante la Comisión Bicameral de Seguridad del Congreso de México para aclarar el controvertido asunto.
La semana pasada, un diario estadounidense publicó que un total de 24 agentes de la CIA y de la DEA participan en México en labores de investigación y entrenamiento para combatir al narcotráfico y al crimen organizado.
Posteriormente portavoces del Departamento de Estado estadounidense aseguraron que su Gobierno había intensificado sus operaciones de apoyo a la lucha antidrogas en México con un mayor intercambio de información e inteligencia sobre las organizaciones criminales que actúan en México.
Ante las aclaraciones, sectores sociales entraron en disgusto, incluyendo la del poeta mexicano Javier Sicilia, uno de los activistas más dinámicos en los últimos meses, así como de algunos legisladores por considerar estos hechos como una violación a la soberanía nacional.
"La participación de funcionarios extranjeros en nuestro país no les autoriza el ejercicio de tareas reservadas al Gobierno mexicano, ni les faculta ejercer actos de autoridad en territorio mexicano", puntualizó Blake a los medios.
Blakle reconoció que su Gobierno necesita "contar con información adecuada para que el combate a la delincuencia organizada trasnacional" tenga un resultado "más eficaz".
Por ello, "hemos procurado una coordinación sistemática de información e inteligencia mediante la integración de datos e intercambio de información", dijo.
Entretanto, también en rueda de prensa, el presidente de la Comisión de Seguridad del Senado, Ricardo Arce, afirmó que los funcionarios mexicanos no precisaron la cifra de agentes de Estados Unidos que se encuentran en el país, pero dijeron que todos estos están "de manera eventual" y con "estatus e inmunidad diplomática" por acuerdos bilaterales.
"No actúan en funciones operativas sino en la investigación y la asesoría técnica, por lo que no violan las leyes del país", indicó el legislador.
La comparecencia de los responsables de la seguridad y diplomacia mexicana se realizo en el Senado mexicano a puerta cerrada por razones de seguridad.
Por otro lado, en Lechería estan amenazando con sacar a los migrantes de la casa para migrantes San Juan Diego.
Mediante un comunicado, la organización detalló que al menos 30 habitantes de la comunidad se congregaron al exterior del albergue para exigir su cierre.
Los inconformes amenazaron con quemar las instalaciones o con irrumpir y sacar a los migrantes. Los pobladores argumentaron que atrae problemas de narcotráfico a su barrio.
Durante ese tiempo, los migrantes permanecieron al interior del albergue mientras defensores negociaban con los habitantes.
Amnisitía Internacional recordó que el siete de agosto fue localizado junto a unas vías del tren, cercanas al refugio, el cadáver del migrante guatemalteco, Julio Fernando Cardona.
Según los migrantes, agentes de la policía municipal arrestaron a Cardona varias horas antes de que fuera hallado muerto.
Amnistía denuncio que hasta el momento no existe ningún detenido por este hecho y los responsables permanecen libres.
Testigos afirmaron que las lesiones que presentaba Julio Fernando sugerían que lo habían golpeado en la cabeza hasta matarlo.
Amnistía Internacional señaló que muchos migrantes son secuestrados por bandas criminales, en ocasiones con la complicidad de funcionarios locales.
Del mismo modo, advirtió que este sector social se encuentra en una situación extremadamente vulnerable a su paso por México debido a los abusos cometidos en su contra.
Fuente: Agencias de noticias
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